domingo, 6 de noviembre de 2016

Demasiada penalización. Osasuna 0- Alavés 1

En lo que para mí era un partido abocado al empate, un tremendo error infantil de un jugador veterano propicia un penalti que termina por decantarlo a favor del Alavés. Creo que fue demasiado castigo para un equipo que sin ofrecer grandes cosas sí que por lo menos demostró sacrificio y no mereció tal penalización.

No estamos viendo eso que se llama gran fútbol en El Sadar, pero es que tampoco lo vimos el año pasado e históricamente Osasuna no creo que haya sido un ejemplo de lo que hoy se defiende como jugar bien. Si partimos de la base de que quien se sienta en el banquillo local nunca en su vida de entrenador ha querido tener el balón más allá de tres toques, nos frustraremos en exceso como pidamos ver algo más que eso en este Osasuna.

Esta semana se colgó un vídeo de un entrenamiento en el que se veía y oía a Martín echando una buena bronca a Unai por algo que no le gustaba. El sentir general es que estábamos ante una nueva lección de coaching y otro ejemplo más de motivación a un equipo; ni una cosa, ni la otra. Lo que dejaba ver de manera nítida el vídeo era que Martín no quería saber nada de que el balón fuese por el carril central, que quería jugar por los dos carriles exteriores y que su jugada se basaba en el cambio rápido de banda pasando por centrales, nunca por pivotes.

Si bajas con esta premisa al campo, lo que luego ves te puede gustar más o menos (a mí cada día menos), pero lo que no te ofrecerá será sensación de frustración. Lo que sí me preocupa y me parece llamativo son ciertos comportamientos ayer en el campo; errores infantiles de veteranos, jugadores fuera de sí y del partido y otros en estado de juego bajo o muy bajo. Me refiero a Miguel, Oier, Roberto y De las Cuevas.

Oier creo que paga los platos de errores ajenos atribuibles a él. La mayoría de su partido estuvo basado en decisiones correctas y bien hechas de comienzo de presión, pero sin embargo no fue acompañado en ese aspecto por sus compañeros y aquello quedaba como salidas a ningún lado. Falso, él sí salía bien, pero otros no hacían lo correcto.

Me preocupa Roberto, y me preocupa en exceso, cuando se "rauliza" y se sale de su concentración estando pendiente más de protestar y de enfadarse con los rivales que de jugar como él solo sabe. Me deja ver cierto momento de exceso de ansiedad en el equipo y no fue él solo el que me lo ofreció; el partido de De las Cuevas y de Sergio León me genera dudas del momento mental del equipo.

Aun con todo, no creo que Osasuna mereciese perder de este modo y creo que el paradón que le hace Pacheco a Kenan cambia en demasía el rumbo del partido. Partido al que, por otra parte, Martín nunca le supo meter mano. No pudo en ningún momento con la que le había preparado Pellegrino con Toquero por la derecha y con Camarasa por detrás de Fausto para provocar la salida Miguel Flaño

Este gráfico es preocupante para la defensa de 3 y generaría inseguridad en los niños, si no fuera porque ayer volvieron a estar más que correctos. Atrás quedaron aquellas dudas sobre el rendimiento de Unai y de David, si bien volverán a aparecer, seguro. Son los pasos de todo crecimiento. Se duda de Cristiano, no se va a dudar de dos debutantes... 


En definitiva, vuelta a las andadas y aparición en escena de la duda sobre la continuidad del míster. Aparece en el escenario como personaje estelar, pero no olvidemos que nunca se fue de la escena de la obra. De hecho, yo diría que desde el minuto uno ha sido un espectador con una localidad privilegiada.



No hay comentarios:

Publicar un comentario