domingo, 12 de febrero de 2017

Cambios, novedades, pero 3 goles en contra. Lo de siempre.

Recibió Osasuna al todopoderoso Madrid con sus mejores galas, luego se pudo ver que el césped nuevo no es tan de gala como parece sino que tiene más fachada que interior. Quizá las dos semanas de descanso que va a tener le vendrán bien, ayer el balón no botaba y parecía ralentizar los movimientos.

Dicho esto, el partido tuvo más de buzo y de herramientas de trabajo que de etiquetas y trajes chulos. Esos se los quedaron en exclusiva Isco, Modric y Benzema; pero por encima de todos ellos un tipo con una calidad terrible y una facilidad para buscarse la vida con su inteligencia como pocos; Sergio León. El gol que le birla a Varanne y Sergio Ramos robándoles la cartera a su espalda provoca que Zidanne tiemble un poco y meta en el segundo tiempo dos líneas de cuatro que le dieran más seguridad, olvidando la defensa de 3 centrales.

Osasuna cambió su esquema y su apuesta desde que llegó Vasiljevic y se juntó con Alfredo. Estábamos sufriendo una sangría en forma de goles en contra y ayer la pareja rojilla propuso un 4-4-2 intentando cerrar la zona de recepción de Modric o Isco a las espaldas de los pivotes. Una vez que Causic perdió el sitio, fue aprovechado por el Madrid para buscar a Ronaldo en carrera y ahí el portugués es casi imparable. Ayuda la lentitud alarmante de Vuja, que está más para alimentar la confianza del osasunismo que para jugar en primera división al día de hoy.

Demasiado golpe para Osasuna en una primera parte en la que estaba bien plantado en el campo y no merecía tal castigo. Se sobrepuso y logró empatar, dando de nuevo margen al sueño de la victoria. La tremenda lesión de Tano y la posterior de Fuentes mermaban considerablemente esta esperanza. No por los jugadores en sí, sino porque esos dos cambios dejaban en el campo a dos jugadores sin gasolina y perdidos en fuegos de artificio: Jaime y Riviere. Para ellos fue un sufrimiento llegar al minuto 90 y Osasuna salió muy mal parado con esto.

Al cambiar Zidanne a 4-4-2 y apostar por la llegada por el centro para dar un último pase a Ronaldo, el cuerpo técnico de Osasuna temió por la segunda amarilla a Fausto y le sacó del campo para meter a Loé

Raoul ni está ni se le espera en breve. Ayer fue un puro despropósito, y no me refiero a sus pérdidas de balón sino a su colocación y su lentitud de movimientos. El segundo gol, con su despiste y cierre en el saque de banda del rival, le deja en mal lugar. Luego ya la equivocada colocación de Clerc (una vez más cuando está de lateral) y la hablada velocidad de Vuja, hacen el resto.

Aun así yo seguí viendo a Osasuna con alguna opción. El Madrid no mataba el partido y daba chance para una falta o alguna llegada de Sergio León, no se me ocurre más en este equipo, pero al final salió todo al revés y los blancos cerraron el duelo con un tercer gol.

Osasuna sigue dejando todo en el campo, dejando buenas sensaciones y alimentando el matrimonio equipo-grada, es un equipo honrado como pocos. Como soy de los que creo que no damos lo suficiente para salvarnos, quizá sea el momento de pensar en futuro más lejano y seguir haciendo CLUB de cara a tiempos cercanos.

No quiero cerrar esto sin enviar un abrazo enorme a uno de esos jugadores que siempre quisiera tener en mi plantilla. Tano es de esos que va de cara, que no tiene vueltas y que le ves claro que deja todo lo que tiene. El fútbol será justo con él y volveremos a verle en sus mejores tardes.


Foto: @sandrika24





martes, 7 de febrero de 2017

Ni con el viento a favor. Real Sociedad 3- Osasuna 2

Esta semana mi post viene con retraso puesto que fue publicado por Orain y he dejado que el lunes solo estuviera publicado por ese medio.

Os dejo el enlace al medio y el post como tal.


http://navarra.orain.eus/desde-los-ojos-irunsheme-viento-favor/

Como ya ocurrió allá por agosto, el partido contra la Real estuvo presidido por la climatología, que marcó buena parte del devenir de aquel. Si en el segundo de liga hablábamos de una temperatura de 35º que lastraba el juego, ayer el temporal de viento, lluvia e incluso granizo dejó ver dos partes totalmente antagónicas para ambos equipos.
Desconozco quién eligió cambiar de campo en el sorteo inicial pero presumo que pudo ser Osasuna y creo que, si fue así, lo hizo de modo adecuado. El viento era tan fuerte que jugar a su favor iba a hacer complicadísimo el control del balón y la precisión en pases, mucho menos difícil que jugar a la contra. Salvo dos tiros de fuera del área, el juego de la primera parte demostró que la elección era correcta.
La Real se encontró con esa dificultad y además Osasuna le puso en otro problema; vimos, por fin, una línea con dos pivotes bajo el mando de un omnipresente Fausto y un De las Cuevas impidiendo la salida limpia de Illarramendi. La alineación de Eusebio, con el cambio de Granero por Zurutuza, impedía lo que vimos en la primera vuelta en El Sadar. La superioridad que creaba el triángulo central sobre un único pivote osasunista ayer se diluía y eran los rojos los que buscaban las cosquillas a la defensa donostiarra con pases al hueco que tanto Riviere como Kenan sabían buscar con mucha movilidad.
La segunda parte cambió por completo; a pesar de llevar a favor el marcador y el viento, Osasuna estuvo mucho menos cómodo, notó el cansancio en sus hombres clave (por algo se dice que el ritmo de primera no perdona) y la Real empezó a tocar y a crear peligro. Bien es cierto que la salida del jugador que provocó la llamada “sima Zurutuza” tuvo que ver mucho en ello. La Real pasó a su 4-3-3 en ataque contra el 4-2-3-1 que tenía hasta entonces y ahí Osasuna volvió a las andadas. Primer gol de cabeza a saque de esquina y segundo gol con una pared por pasillo central con demasiadas facilidades. Así es complicado hacer algo de fundamento.
Solo la salida de dos jugadores de calidad demostrada, que no ejecutada casi nunca en el caso de Jaime, pusieron el marcador en aprietos para los donostiarras y nos hicieron soñar con un posible y justo empate.
Viento hubo para dar y tomar y ninguno de los dos equipos supo jugar con él a favor. Peor parado Osasuna en una jornada demasiado clave, viendo los resultados de los rivales. Sigo con mi pregunta: este juego tan bonito para el espectador, ¿nos da para estar en primera? Vistos los goles en contra, los resultados y yo opinamos que no.