Navarra, tierra de (e)mociones. Levante 2- Osasuna 0

Llevamos unos días (semanas, meses, dos años) oyendo hablar de moción de censura para retirar del poder y Osasuna ayer se marcó una rueda de prensa de hora y media jugando con la ventaja de haber ganado una reciente moción de confianza.

Con el aval que te da ganar este tipo de mociones, y con lo que a los osasunistas nos gustan las (e)mociones, ayer los rojos nos bajaron a la parte baja de nuestro particular Dragón Khan. ¿Fue desmesurada la euforia tras el partido contra el Atlético? Quizá, base había, y en estas épocas de mociones de censura políticas o laborales no viene mal ser optimistas en algo.

Para analizar el partido de ayer igual podríamos coger las crónicas y comentarios del partido del domingo pasado y ponerlas a la vuelta. Son casi simétricas. Gol tempranero que cambia todo el tapete y que ayer al Levante le viene de perlas, como siempre le ha ido. No podemos hablar solo del Levante de Caparrós; el Levante de JIM también era un equipo veterano, marrullero, cerradito y saliendo a la contra. El de Utrera ha encontrado su talla perfecta para el traje.

En el primer gol nos la vuelven a hacer de un saque de banda en el que Silva y Armenteros están muy mal situados y con Andrés demostrando, de nuevo, que este no es su año. Si bien este no es el fallo más grande que tuvo ayer para mí. Lotiés bien pudo acabar lesionado en una horrible entrada de Barral, híper motivado como siempre contra Osasuna, porque el portero se mostró indeciso de si salir o no. Ahí está el fallo de Andrés esta temporada: duda en demasía y eso provoca desconfianza en el resto de la defensa. 

No supo, o no pudo, jugarle Osasuna al Levante con el gol en contra, volvimos a ver a un Cejudo que a mí cada vez me recuerda un poco más al que era cuando llegó (renovación o contrato nuevo motiva al más pintado), pero no fue suficiente porque ayer ni Lolo ni Silva, y mucho menos Damiá, fueron los del domingo pasado. Los cimientos del edificio temblaban y eso es mucho lastre para un equipo que no tiene fondo de armario.

El segundo gol ya fue una losa muy pesada para poder levantar. Gol con fallo de Damiá por dejar darse la vuelta tan fácil dentro del área, pero no menor es el fallo de Arribas de no encimar en la caída. ¡De manual! 

La segunda parte tocaba heroica (creo que nadie la esperaba con los 22 que había en el campo) y desesperación porque con el Levante no se juega un minuto seguido y mucho menos si va por delante en el marcador. El fútbol ojalá ponga en su sitio a un tipo como Juanfran. En mi opinión es, junto con Marchena, el jugador más antideportivo que hay en la LFP.

Javi Gracia movió bien el banco y pasó, de primeras, a centro del campo con un pivote quitando a Lolo y metiendo a Lobato para jugar con una línea de 4 "jugones". La innecesaria y brutal (de bruto) entrada de Víctor nos dejó con superioridad y de nuevo el míster leyó bien la situación colocando defensa de tres. Todo fue infructuoso porque tienes delante lo que tienes y además con el portero más en forma de la liga.

Algo bueno podemos sacar de ayer: aunque caímos en ocasiones en la trampa del Levante (me niego a decir que de Caparrós) salimos de la batalla sin lesionados y sin sancionados y eso no es fácil ante jugadores tan marrulleros como Juanfran, Navarro o el que ayer más me desesperó: Simao.

Dicho esto, y con la semana clave en la que entramos, seguiremos adelante con la moción de confianza, ¿no? Yo la sigo proponiendo, estoy seguro que la inmensa mayoría del arco parlamentario del osasunismo también. Y si no, pues siempre podrán llegar más (e)mociones.

 Foto: www.antoniofernandez-r.com