El domingo, en la previa del partido, la junta directiva con su presidente a la cabeza hizo entrega de la medalla de oro y brillantes a cinco socios que celebraron sus 50 años de afiliación a Osasuna. En este caso me tocó de cerca al tener un tío carnal entre los homenajeados y esto aumentó al ver que entre ellos también estaba el socio número 1 de mi peña sanferminera.
Como dijo el Presidente el acto fue como Osasuna, sencillo y humilde. Unas breves palabras del presidente, un apunte en euskera por parte del Subiza y las imposiciones de medallas. Después pudieron ver el partido junto con su acompañante desde el palco presidencial. Por lo que pude comprobar al final del partido desde ese sitio se vio el partido igual que desde mi localidad situada unos metros más arriba.
Desde aquí mi homenaje a los cincuentenarios y también al resto del socios que en momentos como los actuales es cuando realmente sale la vena rojilla de sufridores irremediables y no de esos que lo mismo te dicen: vais a bajar como no espabiléis, que lo mismo luego te dicen: hey, que vamos a la final de Copa.
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